Un cliente del sector aeroespacial y de defensa enfrentó un desafío significativo: sus vehículos y componentes militares requerían pruebas en una cámara lo suficientemente grande como para albergar sistemas completos de vehículos, ya que sus cámaras de prueba existentes eran demasiado pequeñas. Además, la cámara debía cumplir con estrictos requisitos de refrigeración para simular con precisión las condiciones ambientales.